No existe diferencia alguna entre un "heterosexual, gay, lesbiana o bisexual", al final del día, somos seres humanos, y para la naturaleza, todos somos iguales.
Efímera Apreciación es un blog que brinda información y/o opiniones acerca de temas con gran relevancia y también poco conocidos.
lunes, 18 de mayo de 2015
Homosexualidad.
"La homosexualidad no es natural... Lo dice un libro donde las serpientes hablan, los muertos resucitan, un hombre camina sobre el agua y una virgen tiene un hijo" Friedrich Nietzche.
La homosexualidad es la práctica de relaciones sentimentales con personas del mismo sexo.
El término "gay" se utiliza para referirse a las personas homosexuales; en el caso de las mujeres, suele utilizarse el término "lesbiana". Por otro lado, cuando una persona siente atracción por hombres y mujeres, se le califica como "bisexual".
En pleno siglo XXI, nosotros como seres sociales utilizamos dichos términos para hacer referencia a las preferencias sexuales de otras personas; en algunos casos, se utilizan para discriminar a aquellas personas "homosexuales".
Y aquí viene la pregunta generadora: ¿Existe necesidad de utilizar esos términos con personas que son iguales a nosotros? Y al decir iguales no hago referencia a las mismas preferencias sexuales, sino a físicamente. ¿A un "gay" o a una "lesbiana" les dejan de funcionar sus órganos sexuales sólo por gustarle alguien de su mismo sexo? ¿Y qué hay de un "bisexual"? ¿Desarrollará ambos órganos sexuales por gustarle ambos sexos?
Son preguntas un poco sarcásticas y poco pensadas, pero vaya, ¿a caso las personas piensan antes de otorgar dichos seudónimos a los demás? Y es que, es una pregunta que ya va más allá de la preferencia sexual. "Gay" y "lesbiana" se utilizan como formas de insulto a personas heterosexuales.
Los "homosexuales" no dejan de ser mujeres y hombres. No dejan de ser humanos; sin embargo, se suele hacer menos (en pocos casos) a algunos de ellos. Y ahí va de la mano la "Homofobia": una fobia (o quizá enfermedad) que consiste en el rechazo y odio hacia las personas homosexuales, tal como la Xenofobia (odio a los extranjeros) o el racismo. En la homofobia se califica a los homosexuales como seres inferiores o anormales.
Y aunque actualmente existen personas que dicen no ser homofóbicos, no he sido espectadora de que un hombre sea capaz de ver a una pareja de "gays" besándose, o que emita algún comentario positivo. Al contrario, les produce asco y dan críticas (a veces) hirientes. Acciones quizá machistas o egocentristas.
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